En este artículo se reconstruye el caso de la señora Concepción, habitante de una localidad rural del estado de Querétaro, que fue detenida en el año 2005 por dar comida y alojamiento a migrantes centroamericanos en tránsito, y liberada dos años después. Su caso condensa una serie de modificaciones en las prácticas solidarias hacia los migrantes y permite explorar algunos desplazamientos en los discursos sociales sobre la migración y la solidaridad ocurridos en México durante los últimos quince años. Su microhistoria muestra los embates del Estado en su persecución de los migrantes centroamericanos y una ruptura en las gramáticas sociales que sostienen las prácticas solidarias. La solidaridad que practicó esta mujer rural se fundamentaba en una serie de identificaciones con los migrantes como individuos pobres y necesitados, pero también en una moral del don que enfatizaba el valor de dar desinteresadamente.
Derechos de autor 2019 Migraciones Internacionales
Esta obra está bajo una licencia internacional Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0.